jueves, 6 de octubre de 2022

No me sirven las palabras

Tal vez es que ya lo sabía y por eso no me duele tanto. Puede ser que era algo que hace cuatro años había asimilado, pues ya se encontraba inerte, sin una sonrisa y sin una verdadera razón de ser, sin nada que regalarnos, excepto esa memoria de todo aquello que se quedo en el camino, que fue parte de una vida de crear no sólo arte, sino sonrisas, emociones, percepciones etc.

Quizás sea que yo ya sabía que tarde o temprano te convertirías en energía cósmica y como dice El Pirata: sobran las palabras. Creo que sólo quedan los recuerdos de tres conciertos, uno con la camisa a cuadros, otro con un adiós y el último con una uña que quedara entre mis posesiones más preciadas, una púa del maestro y un gran arrepentimiento por no hacer ese viaje a L.A.

Podría decir gracias totales, sin embargo, prefiero decir: Saber decir adiós es crecer. Gracias Gus.

Volví

 Hoy regreso a ti, hoy soy un hombre diferente, pero en muchas cosas me mantengo igual. Hoy regreso a expresarme a través de las palabras que quedarán para la eternidad y que podrán decirle al mundo que hoy volví a fallar. 

No era mi intención dañar, no era mi idea lograr el sufrimiento ajeno, pero llevo conmigo un demonio que me acompaña por la eternidad y no me deja en paz, un demonio que siempre me orilla a actuar igual.

Quizás algún día pueda ser diferente y decirle al mundo que ese no era yo, quizás pueda salir adelante y demostrar que puedo ser otra persona. 

Hoy estas palabras solo son catarsis, solo son ideas que tienen que correr porque no pueden seguir dañandome. 

Ya cada vez me alejo más de esto que me gusta hacer, la realidad es que ahora cada muerte me hace regresar a ti, no se trata de sufrir solo por el hecho de hacerlo, por querer ser una víctima, todo esto es por sublimar, puede ser que nunca sufrí como lo hice ver o quizás fue mucho mas de lo que podría ser capaz de contar. 

No sé hasta dónde me es posible regresar a esa vida que un día tuve, no quiero regresar al sufrimiento, mucho menos a esa compañía que no era para mi, a la cual dañe y en perfecta reciprocidad me causo dolor.

Solo anhelo vivir de nuevo esa situación en la que yo era capaz de plasmar, esos momentos en que era bueno contando historias, realidades falsas y mentiras casi reales, mundos tan cercanos a lo irracional y fantasías tocando lo mundano. 

Necesito un poco de inspiración, puede ser que ya no se trate de contar historias mías, posiblemente requiero de una historia real, una muerte natural, un pequeño susurro, un sufrimiento externo, una verdad que pueda ser modificada y me permita contarla a mi modo, a mi manera y lograr sentimientos como aquellas del ayer, tal como si fuera mía.